Se avecinan grandes cambios en el Strip de Las Vegas, y no sólo en el horizonte. Los Athletics, equipo de la Major League Baseball, han dado un gran paso hacia la construcción de un estadio de 1.750 millones de dólares en uno de los rincones más emblemáticos de la ciudad: el Tropicana.
Dinero privado primero, dinero público después
El equipo ha solicitado oficialmente un permiso de construcción comercial al condado de Clark, que cubre obras de cimentación y servicios públicos por valor de más de 45 millones de dólares. Este es uno de los últimos pasos antes de que comience la construcción real, y antes de que entre en juego el dinero público.
Antes de recibir financiación pública, el equipo debe invertir 100 millones de su propio dinero. De momento, ya han gastado más de 50 millones. El próximo trabajo de la fundación les acercará a esa cifra.
Una vez que esto ocurra, se podrán desbloquear hasta 380 millones de dólares en fondos estatales y del condado. Los A’s también están recaudando 550 millones de dólares de inversión privada, ofreciendo participaciones en la franquicia para atraer a socios de Nevada y otros lugares.
Un estadio que es puro Las Vegas
El proyectado estadio de Las Vegas tendrá capacidad para 33.000 aficionados y ocupará 9 acres del actual Tropicana. El resto del terreno se transformará en un nuevo complejo Bally’s, que añadirá aún más entretenimiento al Strip.
El estadio promete un diseño moderno adaptado a Las Vegas, audaz, llamativo y construido para algo más que el béisbol. Se espera que acoja conciertos, eventos y atracciones que vayan mucho más allá del deporte en sí.
Aunque las aprobaciones definitivas aún están pendientes, el impulso es evidente y los residentes de Las Vegas pueden esperar ver un movimiento real en las obras en los próximos meses.
Lo que esto significa
No se trata de un estadio más. Es una apuesta para que Las Vegas se convierta en una ciudad de grandes ligas en más de un sentido. Este proyecto traerá empleo, turismo e inversiones a largo plazo al Strip.
El estadio de Las Vegas ya no es sólo un plan. Se está haciendo realidad, y está ocurriendo justo en nuestro patio trasero.